Autismo. Del diagnóstico al tratamiento
La investigación empírica, la práctica clínica y los desarrollos teóricos de las últimas décadas han brindado nuevas herramientas descriptivas, explicativas e interpretativas en el campo del autismo. Dichas contribuciones sirven a los fines de repensar críticamente las intervenciones vinculadas a los contextos familiares, educativos y terapéuticos. Por otra parte, si atendemos a los últimos datos epidemiológicos disponibles, que muestran que la prevalencia de casos dentro de los trastornos del espectro autista es de 6.5 cada 1000 nacimientos, es evidente que estamos ante un nuevo desafío como profesionales de la salud. Incluso estadísticas menos conservadoras están señalando la cifra de 1 cada 88 nacimientos (Centers for Disease Control. CDC. USA).
El autismo se ha estudiado en la última década desde diversas perspectivas –neuropsicológica, neurobiológica, genética, cognitiva- y ha dado lugar a sucesivas reformulaciones en lo que hace al diagnóstico y definición del propio síndrome, naturaleza del trastorno autista, etiología y práctica clínica, desde las primeras formulaciones del Dr. Leo Kanner (1943) y el Dr. Hans Asperger (1944). Una progresiva integración de los distintos niveles de análisis del trastorno contribuirá a lograr una comprensión más profunda de un cuadro que presenta una gran variedad de manifestaciones y una gran heterogeneidad en los distintos sujetos. Los estudios actuales de los trastornos del espectro autista se definen por varias notas esenciales: el predominio de un enfoque psicogenético; el establecimiento de un foco comunicativo, que supone que el autismo sólo se puede entender cuando se entienden la comunicación y las relaciones interpersonales en el contexto de la intencionalidad humana, como nos recordaba Ángel Rivière; la presencia de modelos centrados tanto en aspectos neurobiológicos, cognitivos como afectivos. Estos modelos resultan más precisos, más fundamentados por la investigación, más profundos e integrativos que los que había en los años anteriores en el campo de la psicología. Asimismo se produce el desarrollo de terapias funcionales, con una perspectiva ecológica, que atienden especialmente a los contextos y otorgan un papel muy importante a los miembros de la familia, al bienestar emocional de las personas y su calidad de vida.
En este contexto se brinda la propuesta del presente libro. Nuestro objetivo es ofrecer las perspectivas de un equipo de investigadores y clínicos de excelente nivel académico, de reconocida trayectoria profesional, con publicaciones internacionales y con un profundo conocimiento de la temática. La mayor parte de ellos han sido pioneros en el mundo en la difusión de estos temas, realizando investigaciones significativas en el área, promoviendo la innovación en el campo clínico y educativo y contando con experiencia en evaluación, diagnóstico y tratamiento.
Esta obra es el fruto del respeto, la colaboración científica y la amistad y surge con el fin de compartir las investigaciones, la experiencia clínica y la labor académica de un conjunto de profesionales que desde diferentes perspectivas y disciplinas, trabajan con personas con autismo y sus familias.
Responde a un desafío y a un compromiso social que nos urge en la comunidad hispanoamericana: contribuir a romper barreras al aprendizaje y la participación; crear culturas inclusivas, difundir conocimientos actualizados basados en las últimas investigaciones científicas, favorecer las políticas sanitarias y educativas que atiendan a las necesidades específicas de las personas con TEA y sus familias.