No sólo un (video)juego

Agustín Pérez Fernández, docente a cargo del taller de Videojuegos de FLACSO Virtual, brindado en el marco de la muestra ‘Play the Game Recargado’ en el Espacio de Fundación Telefónica, responde preguntas sobre el inicio de su interés por los videojuegos, el futuro de los mismos y cómo hacer para desarrollar el de tus sueños.

No sólo un (video)juego

¿Qué nos podés contar del taller que estás dando en Fundación Telefónica?

El taller está pensado para que los participantes tengan un panorama de lo que son los videojuegos y como se hacen. Está dirigido para personas que no tienen experiencia en la industria y que tal vez nunca jugaron un juego en su vida. Busca derribar algunos mitos sobre los videojuegos como que son solo violentos y que son complicados de hacer. Acercamos a los alumnos a herramientas de desarrollo muy accesibles para que comprendan que los videojuegos son un nuevo medio de expresión accesibles para cualquiera y con el cual se puede tocar cualquier temática posible.

Los objetivos didácticos son que aprendan un par de herramientas para hacer juegos. Twine para aprender sobre narrativa interactiva y una introducción a Game Maker para hacer todo tipo de juegos. También mostramos un panorama introductorio de cómo se trabaja en la industria profesional y los introducimos a algunos términos técnicos muy utilizados.

¿Qué es lo que más te gustó (por ahora) del taller?

Me encanta cuando vienen personas que no tienen ningún contacto con los videojuegos o tienen un contacto muy superficial. Siempre terminan sorprendiéndose con las cosas que se pueden hacer y se derriban muchos mitos sobre qué son los videojuegos. A lo largo de las clases todos los alumnos terminan con un pequeño proyecto propio y siempre me sorprende el ingenio de las personas que no tienen una estructura mental sobre lo que son los juegos ya que inventan cosas nuevas muy ingeniosas. Algunos juegos destacables de talleres anteriores son uno que tenía como temática un viaje onírico por los sueños del creador, u otro, un juego sobre la muerte donde el personaje reflexiona en la tumba de su abuelo.

¿Cuándo empezaste a interesarte por los videojuegos?

Los videojuegos me gustan desde muy chico. A mi hermana mayor le compraron una Nintendo cuando yo tenía 5 años aproximadamente y nos pasábamos tardes enteras jugando Balloon Fight y Mario Bros. Mis padres hace mucho que trabajan usando computadoras, por lo que pronto conocí juegos de PC como el Prince of Persia.

Cuando estaba en la secundaria descubrí el programa Game Maker y aprendí a usarlo leyendo el manual. Haber conocido esa herramienta fue lo que me llevó a empezar a hacer juegos y con el tiempo convertirlo en mi profesión.

¿Qué dificultades te encontraste emprendiendo tu propia empresa de videojuegos?

Poder armar Chimango Games me llevó mucho tiempo de formación autodidacta. Primero haciendo juegos por mi cuenta y luego trabajando en empresas de desarrollo de juegos como productor y diseñador de juegos.

En un momento quise independizarme para hacer juegos propios. Estuve un par de años desarrollando solo, con algunos trabajos freelance o temporarios. Me llevó tiempo encontrar un equipo profesional, con el que podamos trabajar bien, para asociarme y empezar Chimango Games.

Conocí a mi socio Claudio Griglio, ilustrador y animador, trabajando en Joju Games y nos dimos cuenta que teníamos una muy buena dinámica de trabajo. Luego la vida nos separó cuando renuncié, pero varios años después volvimos a encontrarnos para fundar Chimango Games junto a nuestro otro socio, Adrián Gonzales, que se encarga de la parte comercial de la empresa.

Hoy en día intentamos hacer juegos propios mientras vivimos de hacer juegos para marcas como Cartoon Network y Vorterix.

¿Qué es lo nuevo que se viene en videojuegos?

El mundo de los videojuegos está viviendo varias revoluciones interesantes de forma simultánea que están cambiando el panorama de la industria a futuro: la democratización de las herramientas de desarrollo, la realidad virtual y la masividad de los dispositivos móviles.

Con respecto a lo primero, cuando empecé a aprender a hacer juegos era un sueño casi imposible, ya que las herramientas profesionales eran imposibles de conseguir para la mayoría de la gente. Ya había pasado la etapa de los 80’s y 90’s cuando cualquiera podía programar algo sencillo y venderlo. El público exigía cosas más complejas. Los motores de juegos más importantes costaban fortunas. Game Maker fue una de las primeras herramientas que cambiaron el panorama dándole acceso gratuito a cualquier persona de herramientas de desarrollo sencillas de usar. Hoy en día existen miles de herramientas, muy baratas o gratis entre las que destaco Unity, HaxeFlixel, Phaser y Godot.

La realidad virtual, aunque está basada en tecnología que existe hace mucho tiempo, es algo muy nuevo. Todavía no se sabe muy bien para qué lado va a evolucionar ya que está naciendo pegado a los videojuegos, pero parece empezar a separarse para ser un medio de expresión diferente. Los cascos y habitaciones de realidad virtual que probé son mágicos, te transportan a otro mundo donde las reglas todavía no están definidas. Las contras son que por el momento algunos experimentos generan confusión o mareos y la complejidad de configuración hacen dudar que pueda llegar a ser masivo.

Por último, la masividad de los dispositivos móviles está haciendo que la industria mute de enfocarse en hardware dedicados -las consolas de juegos que tenían una base de usuarios de más o menos 70 millones de personas- a enfocarse en el desarrollo mobile que te permite acceder a un público de miles de millones de personas en todo el mundo. Para dar un ejemplo, cuando salió el primer Pokemon para Gameboy, que fue un éxito mundial, aproximadamente 100 millones de personas en todo el mundo tenía la consola necesaria para poder jugar. En cambio, hoy a Pokemon Go ya lo descargaron más de 500 millones de personas solo en Android y seguramente un número similar de personas en iOS.

Que el acceso a esos mercados masivos sea tan sencillo hoy en día, le permite a desarrolladores pequeños acceder a un público que antes no podían ni imaginar. Usando alguna de las herramientas gratuitas antes mencionadas cualquiera puede tener éxito con mucha dedicación.

¿Qué recomendás a los que quieran desarrollar videojuegos?

Usando internet es muy fácil encontrar información de cómo empezar a hacer juegos, por lo que lo que les recomiendo siempre a la gente que quiera hacer juegos es que empiecen investigando tutoriales de la herramienta que quieren aprender. Es importante investigar para saber los diferentes roles que existen en la industria: diseñador de juego, programador, ilustrador, etc… Mucha gente empieza queriendo hacer juegos pero al no saber cómo se hacen, no saben todavía cuál es el rol que más les gustaría ocupar.

Una vez que saben qué rol quieren aprender, deben investigarlo leyendo, preguntandole a personas que ya lo están haciendo profesionalmente y trabajando lo antes posible en eso. El acceso a las herramientas hoy hace que empezar a trabajar de lo que te gusta sea muy inmediato, aunque al principio sea como hobby.

Uno de los lugares en español para empezar es la Comunidad de Desarrolladores de Videojuegos de América latina, DUVAL, que administramos con un grupo de personas. Ahí pueden consultar lo que quieran que sea relativo al desarrollo de videojuegos y sobre cómo empezar.

Muchos de los que hoy en día estamos trabajando de esto aprendimos de forma autodidacta pero las nuevas generaciones pueden aprovechar que hoy mucha gente también enseña. Ir a aprender a algún lugar, haciendo cursos, talleres, carreras técnicas o directamente preguntando, hace que el aprendizaje sea mucho más rápido de lo que fue para nosotros en su momento.

También es importante participar de eventos de desarrollo de videojuegos en tu ciudad y si no existen, inventarlos. En Argentina varias comunidades a lo largo del país empezaron así y luego se convirtieron en varios equipos de desarrollo. Conocer a otras personas con intereses similares es la mejor forma de motivarse a aprender. Uno de los mejores eventos internacionales para empezar a hacer juegos es la Global Game Jam. Este evento consiste en un fin de semana donde en todo el mundo se juntan equipos para hacer juegos con una temática en especial. En Argentina se suelen organizar varias sedes en universidades de varias ciudades del país pero cualquier puede armar una sede sin necesitar muchos más recursos que un lugar para juntar todas las computadoras y las personas.

Estando atento a la comunidad, se informan varios eventos en todo el país que generalmente están organizados por FundAV (Fundación Argentina de Videojuegos) o ADVA (Asociación de desarrolladores de videojuegos de Argentina). En este momento, los eventos más importantes son las Game Work Jam que se hacen una vez al mes en varias ciudades y la Exposición de Videojuegos de Argentina una vez al año principalmente en Capital Federal pero también a veces en otras ciudades.